JOHN L. ALLEN DISECCIONA EN SU COLUMNA DEL NATIONAL CATHOLIC REPORTER CINCO IDEAS ERRÓNEAS SOBRE LA PERSECUCIÓN DE LOS CRISTIANOS EN EL MUNDO DE HOY. ADVIERTE QUE ESTE TEMA NO RECIBE LA MISMA ATENCIÓN QUE OTROS ATAQUES
martes 17 de enero de 2012
El
primer mito es que los ataques contra los cristianos solo se producen allí
donde son minoría. Si se tiene en cuenta, por ejemplo, los asesinatos de
sacerdotes o laicos dedicados a la evangelización en 2011, no pocos se
produjeron en países donde los cristianos son mayoría (Colombia, México,
Filipinas, Burundi...).
El
segundo mito es que la persecución proviene solo de islamistas radicales. Pero
aunque esto sea verdad en algunos países (Afganistán, Pakistán, Somalia...),
sin embargo, también hay ejemplos de convivencia armoniosa entre cristianos y
musulmanes en no pocos países. Y, por otra parte, hay ataques anticristianos
que tienen otros orígenes: ultranacionalistas (Turquía); gobiernos
dictatoriales sobre todo en versión comunista (China, Corea del Norte);
hinduistas radicales (algunas regiones de la India); budistas radicales (Sri
Lanka); intereses económicos (como en la región amazónica de Brasil);
narcotráfico (México)...
El
tercer mito es que “nadie lo vio venir” y que se trata de hechos aislados.
Allen ofrece el ejemplo de Turquía para mostrar cómo el asesinato de un obispo
católico estuvo precedido de un clima de opinión pública anticristiano.
El
mito número cuatro es que “la persecución responde solo a motivos religiosos”.
Allen advierte que las razones por las que los cristianos son atacados no
responden solo a la definición tradicional de martirio –ser matado por odio a
la fe–, sino a una variedad de circunstancias que ponen en riesgo a los
cristianos, pero que hunden sus raíces en su fe.
El
quinto y más pernicioso mito es que el tema de la persecución anticristiana es
un asunto de derechas. Así, en vez de ser denunciado y combatido como cualquier
otra persecución por razón de las ideas, se ve con desconfianza como un tema
que crea división política.
No hay comentarios:
Publicar un comentario